Puente en Isin

Germanicida y pasatiempos varios

Desde aquí quiero dar las gracias a todos y todas los que han participado en esta estupenda salida por Huesca y Navarra:
Nati como estupenda organizadora, que nos ha buscado el mejor albergue de la zona –recuerda aconsejarles que añadan otra ducha mas por planta mesedez-, los burritos mas anaranjados, Luis y Nieves, han podido disfrutar de varios días de marchas, sacado expectaculares fotos por parte de Fer, gruñido a todo cuadrúpedo que cruce en su camino por parte de Baku, los que se saturaron al final de andar por diversas causas: Montse que ya se resarcirá en otra excursión, o María que se nos lesionó al final, o Esther, Jon, Jesús y Elena que prefirieron practicar turismo el último día, así como Jorge que al final se fué sin que nos pudiéramos despedir de él una parte de los burritos.

Hemos tenido días de sol combinados con algo de lluvia, hemos conseguido mezclar deporte, cultura y pasatiempos. El mejor ejemplo fue el del primer día cuando visitamos el monasterio de Leyre, subimos los montes que lo rodean, “expectaculares vistas” según la guía Michelin que llevaba Luis para abrirnos camino. Recuerdos al monje benedictino -el Padre Germán- por su receta licorera que nos alegró las frías noches en el albergue. Lástima que se acabara tan pronto. Pero tampoco fue tan grave ya que algunos se encargaron de buscarle sustituto/s.
En fin, que hemos andado rutas interminables por la nieve, visto paisajes a los que no estamos acostumbrados, comido y cenado como reyes, visitado cuevas con… un murciélago y algunas estalagmitas que recordaban a un falo (no lo digo yo, sino una anciana de 94 primaveras),

nos hemos despistao o perdido por lugares recónditos, intentado visitar monasterios escondidos, dado de comer pan a patos, cisnes y rebaños de ciervos y cabras, contado batallas de chistes entre Joserra y Jon (por cierto quién ganó?), competido olímpicamente al trivial, party, cartas y todo lo que se nos pusiera por delante. Seguramente me dejo algo por el camino así que no me atosiguéis mucho.
Pero al final todo lo bueno se acaba y ya se habló de buscar nuevos lugares para sacarles todo su jugo o barro o salpicaduras inesperadas al cruzar un rio, y no miro a nadie Luis.
En fin, un lugar para recomendar y volver si cabe con el buen tiempo.













PD para la cotilla de mas arriba: a mí las vainas ya me gustaban. Así que ya has eliminado a un sospechoso.
laster arte
joserra